sábado, 13 de marzo de 2010

Ruge el leon




Ruge el leon
y extiende sus poderosas garras.
De hambre las tripas
su carne desgarran.



Y alli mandan al domador
vestido de tela fina
latigo en mano, pecho a la linea
y un olor a sangre caliente
me estremece las entrañas.

cualquier noche de estas
la muerte visitará estas tierras
con su mano arida.

Y los hombre no aprenden,
y la bocas no callan,
como si nos hubiera visitado
poca desgracia.

La injusticia se despereza
y se encuentra a sus anchas,
y un viento helado presagía la noche,
la noche eterna de la ignorancia.

!!!Que nadie muera de hambre !!!
que muera la arrogancia.
Que Dios nos da de su mano
setenta veces la semilla plantada.
Y el hombre en su torpeza
no ve nada.

Ruge el leon
y extiende sus poderosas garras
y siento en el pecho presagios
de sangres derramadas.



Un león ruge en la pobreza de un circo ,
asolado por las hienas ansiosas
por ver como el león llora sus miserias .


Su vida errante de ciudad en ciudad ,
y ver como los niños lo observan
en el momento de llorar sus tristezas ,
como las lágrimas de un duende al final del río .
El circo se levanta cada mañana ,
con el decreto del dolor
y la carpa es un cúmulo de sueños destrozados ,
por los rugidos del león ,
que anhela volver a correr
por los cantos libertarios
de esos sonidos africanos .



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